Sebastián Yatra desglosa 5 canciones esenciales de su nuevo álbum, ‘Milagro’
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«Un milagro puede ser algo tan simple como ver las cosas desde una perspectiva diferente», dice el cantautor colombiano.
El nuevo álbum de Sebastián Yatra, Milagro, es un ejemplo perfecto de cómo las cosas simples de la vida pueden ser un regalo y un recordatorio de que cada momento que experimentamos es único, casi milagroso.
En los últimos meses, el cantautor colombiano ha insinuado su muy esperado nuevo trabajo, lanzado el viernes (16 de mayo) bajo Universal Music Latino. A través de una serie de imágenes, videos y reflexiones personales sobre los “milagros” que inspiraron este proyecto, Yatra ha desvelado gradualmente la esencia de su cuarto álbum de estudio.
Cada una de las 17 canciones representa un milagro único que cambia nuestra perspectiva del mundo: “Energía Bacana” reflexiona sobre los recuerdos. “2 AM” simboliza la libertad. “Vagabundo” encarna la danza. “Lienzo” representa la imaginación. “Una noche sin pensar” captura la complicidad. “Disco rayado” habla de un corazón que no está dispuesto a dejar atrás un lazo que la otra persona ya dejó atrás. El objetivo es contar historias profundas y significativas y forjar una conexión genuina con sus oyentes.
“He experimentado esta emoción en mis otros álbumes también, ya que expresan dónde estoy en mi vida en ese momento,” dice Yatra a Billboard. “Sin embargo, en este momento, esta emoción se siente particularmente fuerte. En mis álbumes anteriores, era una persona que buscaba muchas cosas, como la felicidad, que parecía un objetivo lejano. Hoy, siento que he descubierto todo lo que podría pedir en la vida, y encontré esa perspectiva a una edad bastante temprana”.
El título del LP fue inspirado por una frase del hermano de Yatra, el escritor Andrés Obando Giraldo: “La vida te niega los milagros hasta que te das cuenta de que todo es un milagro”. Yatra vio esto como una señal que reforzó el nombre que tenía en mente para su álbum.
“Encontré que esta definición de milagro era diferente de lo que había encontrado antes. Sugiere que un milagro puede ser algo tan simple como ver las cosas desde una perspectiva diferente”, explica. “Mi naturaleza, las primeras cosas que siempre me vienen, son cosas muy sentidas; eso es lo que más escucho. Pero eso no significa que solo porque es lo que más escucho, no disfrute de las fiestas y también me guste organizar y crear canciones para esos momentos, para ese tipo de sensación. Milagro se inclina más hacia esa experiencia celestial, desde las baladas y letras hasta esas melodías que te dan esperanza. Pero también hay algunas canciones como ‘Vagabundo’, que es felicidad pura”.
A continuación, Sebastián Yatra desglosa cinco canciones esenciales de Milagro. Escucha el álbum completo aquí.
“La pelirroja”
Escribí esta canción en mi estudio en casa. Era la primera vez que escribía con Jorge Villamizar (Bacilos), a quien siempre había considerado un genio y admirado mucho. Es una canción muy colombiana porque todos los involucrados en la creación de la canción son colombianos. Casta, el productor, también estuvo aquí; tocó teclados conmigo en algún momento durante mis shows cuando ambos estábamos comenzando en Bogotá. Julián Bernal también está en la canción. Vive en México pero es un cantautor colombiano de Bogotá, y es muy talentoso y muy paciente.
Es una canción que escribí muy inspirado por la primera canción de mi mejor amigo Jesús, que comenzó a hacer música y a cantar, y él hace un poco de todo, pero la primera canción que lanzó se llamaba “La pelirroja”. Recuerdo que cuando estaba en el hotel, empecé a tocar y comencé con la primera melodía de la canción, y ya me encantaba mucho. Me reuní aquí con el resto de los chicos para escribirla. Había una parte en el coro donde pensé en decir esto sobre el cabello rojo, y dije, “Por supuesto, esta es la canción sobre la canción del cabello rojo de Jesús”. Y así dirigí la letra más en esa dirección.
“Milagro”
En el video de esta canción, verás a un niño tocando el piano y es como toda la música que tiene en su cabeza. Es una canción muy especial porque el piano que escuchas le da al álbum su sonido e identidad. Primero toqué en el piano y luego fue grabado muy bien por Ben Alerhand, quien es un músico increíble y con quien hago mucha música. Sentí que estaba contribuyendo a la producción de las canciones del LP y a aportar mi mente a esa parte de la creación, no solo en componer la melodía y la letra.
“Mi puerto”
Esta canción es súper especial. La escribí durante momentos muy específicos, no para que la gente la escuchara, sino para enviársela a alguien por WhatsApp realmente, simplemente porque era algo que sentía en lo más profundo de mí mismo. De hecho, ya tenía una idea inicial para la canción, ya tenía las melodías y algunas partes de la letra, y terminé de escribirla con Spreadlove a través de una videollamada, porque no estábamos en el mismo lugar en ese momento, y nos conectamos durante como tres o cuatro días seguidos.
“Templo de Piceas” con HUMBE
Esta colaboración con HUMBE significa mucho en este álbum. Él es una de las personas más talentosas que he tenido la oportunidad de conocer, y es un alma súper sensible. Verdaderamente nos hemos convertido en muy buenos amigos. Nos conectamos mucho, y escribir esta canción juntos también fue como un viaje, y fue como un milagro encontrarnos. Tenemos estilos de escritura y gustos musicales muy diferentes. Aunque ambos amamos el pop, escuchas nuestra música y va en direcciones bastante diferentes, cada una con su propia magia.
“Amen”
Quería hacer una canción de protesta, y lo había intentado varias veces. De hecho, cuando le mostré esta canción a Jorge Drexler, me dijo que no era una canción de protesta, sino más bien que había hecho una canción de propuesta. “¡Wow! Él es poético; él es poesía”. Recuerdo haber hablado con Andrés Torres y Mauricio Rengifo sobre cómo me estaba sintiendo y que en ese momento todo lo relacionado con la guerra en Ucrania estaba comenzando. Todo era muy, muy activo. Quería decir cosas, pero creo que es imposible criticar las cosas que te rodean o hablar de ellas sin antes ser crítico contigo mismo, porque todos somos parte del problema y también somos parte de la solución. Así que me miré desde un punto de vista de mi posición, donde a veces quieres salir y hablar y decir cosas, pero tampoco tienes toda la información, por eso digo: “No coincide lo de afuera con lo de adentro/ El mundo en llamas, yo de concierto/ Queriendo hablar sin querer oír/ Y en esta película, el bueno no es el que reza”.
